Se conoce como hipoteca al acuerdo que existe entre un prestamista y su cliente, en la cual se le da al prestamista el derecho a tomar la propiedad del cliente, si este último no paga el dinero que se le ha prestado más los intereses. Los préstamos hipotecarios tienen como destinación la compra de una vivienda o también se utilizan para pedir préstamos de dinero sobre el valor de una vivienda que ya posee.
Los créditos hipotecarios son instrumentos financieros que les permiten a las personas la adquisición de un bien inmueble a pesar de no tener la totalidad del monto del bien o en su defecto les permite obtener sumas de dinero con la garantía de un inmueble para hacer cierto tipo de inversiones.
Es importante tener en cuenta que no todas las personas pueden optar a un crédito hipotecario, para ello deben cumplir con una serie de requisitos que son previamente evaluados por los bancos y entidades financieras, dónde definen si el prestamos es viable a través de un rango de “riesgo” que define se la persona está o no en la posibilidad de pagar el dinero que se le ha prestado.
Las principales características de una hipoteca son:
Los elementos principales que componen una hipoteca son:
Aquellos interesado en créditos hipotecarios deben tener en cuenta que requieren un perfil bien definido que les permite a las instituciones bancarias tener la confianza de otorgar el préstamo ya que están en conocimiento de las posibilidades de pago que tiene el tenedor del crédito.
En sí lo principal es demostrar que se posee un buen nivel económico de acuerdo al monto solicitado, ya que los bancos evaluarán si dispones de hasta un 30% de los ingresos mensuales del hogar para “endeudamiento”, es decir que se debe estar libre de deudas en la medida de lo posible y disponer de ingresos mensuales estables.
De la misma forma se evalúan las referencias comerciales y bancarias de las personas que optan a éste tipo de créditos, por lo que es importante no haber caído en moras, y tener un expediente crediticio “limpio” de inconvenientes. Asimismo, se evalúa la estabilidad laboral de la persona con la intención de establecer si es responsable con sus obligaciones y si será capaz de cubrir sus compromisos económicos con la entidad financiera en caso que se le apruebe el crédito.
Algunos de los gastos asociados con los que generalmente cuenta una hipoteca: